de quien no puede retroceder los días"
Elisabet Cincotta
De hinojos ante la cruz de mis días.
Doblada la espalda ante la cotidiana carga
cuestiona el azar su fortuna
/y su agonía.
Cruje el alma ante cada embate
ante cada fractura de un esqueleto
que huyó sin rumbo una tarde cualquiera.
Las uñas despellejan
la pretérita epidermis de historias añejas
/en espera de la muda que tal vez nunca llegue.
Sabe amargo el intento
/y hunde más el coraje.
Persistir a la espera del milagro.
Persistir.